|
PARTE
- II |
PLAN
DE DESARROLLO URBANO |
14.3.3.4 Análisis
de los costos de infraestructura
Los costos de inversión
en infraestructura para las Áreas Metropolitanas que se presentan
en esta sección, han sido estructurados para su ejecución
a corto, mediano y largo plazo. Los mismos comprenden los segmentos de
inversión pública y privada que, una vez articulados a las
políticas y programas que reforman los servicios públicos,
le darán la dinámica requerida a la ejecución dse
cada uno de los proyectos previstos para el desarrollo integral del Plan,
con el objetivo de satisfacer la demanda estimada en los diferentes horizontes.
-
Costos de inversión a corto plazo.
En el corto plazo
se ha previsto un nivel de inversiones por el orden de los 1,200 millones
de balboas con un énfasis en el desarrollo de las infraestructuras
de electricidad, telecomunicaciones y agua potable.
El programa de inversiones
del IRHE en este periodo, incluye las obras contratadas durante los años
1995-1996 por un monto de 22.1 millones de balboas, cuyo objetivo principal
fue el de garantizar el suministro energético. Los niveles de inversión
para 1997 se acercan a la suma de 60 millones de balboas a lo cual se
agregan cerca de 40 millones invertidos en la planta termoeléctrica
de Bahía las Minas, procedentes del sector privado. Las estimaciones
del último segmento de este periodo, que concluye en el año
2000, se elevan a 400 millones de balboas aproximadamente y han sido basadas
el las proyecciones de la demanda prevista en el Plan Metropolitano, en
los programas de inversión del IRHE y en la programación
de la ARI para el desarrollo de las Áreas Revertidas.
El subsector telecomunicaciones
se ha visto fortalecido con la venta, en mayo de 1997, del 49 por ciento
de sus acciones a la empresa privada Cable & Wireless (C&W). Se
estima que los niveles de inversión para satisfacer el crecimiento
de la demanda en este subsector alcancen la suma de 173.7 millones de
balboas en el corto plazo. Sin embargo, esta cifra podría ser significativamente
mayor, cerca de 369.6 millones, si se incluye el plan quinquenal de la
ARI y el nuevo plan de inversiones de C&W. Esta última consideración
se explica en detalle en la sección 3.2.3 del Volumen V, Programa
de Inversiones.
Los costos de inversión
en agua potable y alcantarillado se reflejan con mayor énfasis
hacia finales del periodo, cuando se pretende incorporar nuevas inversiones
por el orden de los 96 millones de balboas, dentro de los que se incluyen
proyectos para el desarrollo de las áreas revertidas que serán
ejecutados bajo la coordinación de la ARI.
Las inversiones a
corto plazo en otros subsectores como el de desechos sólidos dirigido
por la DIMA y drenajes pluviales bajo la coordinación del MOP,
han sido estimadas con base en el crecimiento de la mancha urbana de las
Áreas Metropolitanas. En cuanto a las inversiones en el segmento
de desechos sólidos, se ha propuesto en el Plan un costo más
elevado con relación a los planes y programas presentados por la
DIMA ya que se incluyen proyectos que no pueden ser postergados, como
la estación de transferencia de Arraiján y el relleno sanitario
de La Chorrera. En cuanto al subsector de drenajes pluviales se reconoce
la necesidad de dar solución a los puntos críticos de inundación
donde se consideran entre otras, las áreas de Chanis y Urbanopat
y el sector de la vía Frangipani y calle 28._arriba
-
Costos de inversión a mediano y largo plazo.
Los costos de inversión
a mediano y largo plazo se han obtenido de los diferentes proyectos propuestos
en el Plan Metropolitano, los cuales se corresponden con la dinámica
de crecimiento de la mancha urbana y del desarrollo de los nodos que se
definen en capítulos anteriores. En la siguiente tabla se presenta
un resumen de los costos totales de inversión para los sistemas
de infraestructura analizados en esta sección del Plan Metropolitano.
TABLA 14.3.3-9
Resumen de Costos de Inversión en Infraestructura
Sector
de Infraestructura
|
Costos
de Inversión en Miles de Balboas |
2000
|
2005
|
2020
|
Agua
Potable |
96,130
|
134,116
|
38,021
|
Aguas
Residuales |
11,502
|
225,312
|
140,997
|
Drenaje
Pluvial |
162,301
|
93,025
|
184,079
|
Desechos
Sólidos |
22,678
|
59,275
|
226,257
|
Electricidad |
515,474
|
478,106
|
1,855,872
|
Telecomunicaciones |
369,646
|
123,000
|
224,000
|
Total |
1,177,731
|
1,112,834
|
2,669,226
|
Fuente:
Elaborado por el Consorcio,. _arriba
14.3.3.5 Acciones
En los artículos
anteriores, se describió la infraestructura necesaria para proporcionar
un servicio confiable y seguro a las áreas de crecimiento del Plan
Metropolitano. En concepto y por definición, esa infraestructura
cumple con las principales estrategias del Plan Metropolitano las cuales
se pueden resumir, brevemente, de la siguiente manera:
Si se restringen
el desarrollo y el crecimiento en el Corredor Transístmico y se
ubican nuevas y mejores oportunidades de empleo cerca de Colón
en las Áreas Revertidas, Panamá y Colón pueden funcionar
como dos ciudades relativamente independientes.
Es necesario
intervenir en la fuerte tendencia observada en el Área Metropolitana
de Panamá hacia un desarrollo lineal en direcciones Este y Oeste.
Es necesario establecer una meta descentralizadora para ubicar
los usos generadores de empleo lo más cercanos posible a las áreas
de vivienda.
Es necesario la concentración planificada de nodos o zonas
especiales mixtas generadoras de empleo, ubicadas en puntos claves dentro
de las áreas urbanas.
Reconocer
la importancia de mantener la consistencia con los objetivos generales
planteados, así como la integración de las mejoras en las
infraestructuras propuestas con las mejoras planteadas para otros sectores.
A continuación se presentan las acciones recomendadas para el corto
y mediano plazos._arriba
- Agua Potable
Proseguir
con el Plan para la implementación del programa de optimización
para Arraiján , La Chorrera y Colón. Procurar la aprobación
de fondos adicionales por parte del BID.
Proseguir con el proceso destinado a determinar el esquema de
participación privada/pública más favorable para
la administración/operación de este sector.
Continuar con el planeamiento, diseño y construcción
de la planta potabilizadora de Laguna Alta y las facilidades de transmisión
asociadas.
- Alcantarillado
Sanitario
Continuar
con el proceso de contratación de consultoría para actualizar
el documento del Plan Maestro para la ciudad de Panamá.
Iniciar y concluir la selección de las firmas consultoras
para desarrollar los Planes Maestros para La Chorrera/Arraiján
y Colón.
Definir el rol a largo plazo del IDAAN para la gestión
de este sector.
Solicitar asistencia por parte de las instituciones financieras
internacionales para los estudios del Plan Maestro y los subsiguientes
programas de implementación.
Construir la primera fase de las siguientes plantas de tratamiento/potabilizadoras
para el final del horizonte del mediano plazo: en Panamá Este,
las plantas de Boca la Caja y Río Juan Díaz; en Panamá
Oeste, las plantas de Ancón y Río Caimito; en Colón,
la instalación regional de Colón._arriba
- Drenaje Pluvial
Desarrollar
investigaciones de campo y estudios de ingeniería de las cuencas
y sistemas existentes en las áreas urbanas y posteriormente desarrollar
un Plan Maestro para cada cuenca urbana.
Definir el rol a largo plazo del MOP, para dar mantenimiento
al sistema de drenaje pluvial.
Identificar fuentes de financiamiento para la corrección
de los puntos de deficiencia críticos conocidos y establecer un
mecanismo de financiamiento adecuado y seguro par el mantenimiento de
rutina.
Corregir las deficiencias que se presentan en el horizonte de
mediano plazo, específicamente en los puntos críticos y
super críticos dentro de los centros urbanos de Arraiján
y La Chorrera; así como en el Barrio Norte y en el Barrio Sur de
Colón.
- Desechos
Sólidos
Realizar
esfuerzos para contratar consultores para desarrollar un estudio de Plan
Maestro para cada una de las regiones metropolitanas.
Definir el rol a largo plazo de la DIMA en cuanto al mantenimiento
y operación de este sector (incluyendo la posibilidad de introducir
esquemas operacionales públicos/privados dentro del contexto del
estudio del Plan Maestro).
El Plan Maestro debería definir la continuación
de la operación con carácter de propiedad estatal del sector
de desechos sólidos a lo largo del horizonte a mediano plazo, evaluando
la forma en la que la gestión del sector podría ser fortalecida
y/o descentralizada.
Planificar y construir hacia el final del horizonte de planificación
a mediano plazo todas las estaciones de transferencia propuestas, las
primeras dos fases de la expansión del relleno sanitario de Cerro
Patacón, la primera fase del relleno sanitario de La Chorrera,
las primeras dos fases del relleno sanitario de Colón, y la primera
fase de las instalaciones de reciclaje propuestas.
Planificación y ejecución de una campaña
publicitaria agresiva relacionada con la práctica ciudadana en
el manejo de los desechos sólidos._arriba
- Electricidad
Proseguir
con el proceso destinado a determinar el esquema de participación
privada/pública más favorable para la administración/operación
de este sector.
Reforzar las funciones del Ente Regulador de los Servicios
Públicos (ERSP) para el otorgamiento de nuevas licencias y
concesiones, así como en el control y cumplimiento de las leyes
que regirán este sector.
- Telecomunicaciones
Garantizar
la cobertura de la demanda en el sector de telecomunicaciones, de acuerdo
con las proyecciones de crecimiento estimadas en el Plan Metropolitano,
procurando altos índices de calidad en la operación y mantenimiento
de la red.
Reforzar las funciones del Ente Regulador de los Servicios Públicos
(ERSP) para el otorgamiento de nuevas licencias y concesiones, así
como en el control y cumplimiento de las leyes que regirán este
sector.
14.3.3.6 SISTEMA
DE EQUIPAMIENTO COMUNITARIO
Este apartado tiene
el propósito de presentar los requerimientos de equipamiento comunitario,
para los dos escenarios de desarrollo propuestos para las áreas
metropolitanas de Panamá y Colón, en períodos que
van de 1995 a 2005 y de 2005 al 2020. Entre los objetivos específicos
podemos considerar los siguientes:
1. Estimar la demanda
de equipamiento comunitario derivada de los incrementos de población
estimados para cada escenario; y
2. Estimar la demanda por períodos para cada escenario, por corregimiento,
sector y distrito._arriba
-Metodología
o Se estimarán los incrementos de población para cada
escenario durante los períodos de 1995 a 2005 y de 2005 a 2020.
o Se aplicarán las normas propuestas en la etapa del diagnóstico,
que fueron utilizadas posteriormente en los estudios de las tendencias
de crecimiento.
o Preparar cuadros de las instalaciones propuestas a nivel de corregimientos,
sectores y distritos.
Las normas a utilizar
son las siguientes:
o Una escuela primaria
por cada 5,000 habitantes y una escuela media por cada 10,000 a 15,000
habitantes; en casos especiales podrán considerarse hasta 20,000
habitantes.
o Para las instalaciones hospitalarias se utilizará la norma de
3 camas por cada 1,000 habitantes y 1 centro de salud por cada 20,000
a 30,000 habitantes.
o Para instalaciones recreativas la norma será de 1 estadio por
cada 200,000 habitantes; 1 gimnasio por cada 35,000 habitantes, 1 piscina
por cada 40,000 habitantes y 1 campo deportivo por cada 30,000 habitantes.
o Para las instalaciones culturales utilizaremos una escuela de educación
artística por cada 65,528 habitantes, 1 museo por cada 164,528
habitantes, 1 teatro-auditorio por cada 163,822 habitantes y 1 biblioteca
por cada 15,000 habitantes.
Mayor información
sobre las normas expuestas se encuentra en el informe que cubre la etapa
del Diagnóstico Estratégico (presentado al MIVI el 14 de
febrero de 1997). Por motivos de consistencia, se han mantenido las zonas
o agrupamientos de corregimientos utilizados para la ciudad de Panamá
en etapas anteriores, sobre la documentación de las condiciones
existentes, el diagnóstico y el análisis de las tendencias
de crecimiento.
Para el manejo de
las normas propuestas se han aplicado los siguientes principios:
1. La escuela primaria
estará íntimamente relacionada con el corregimiento y los
requerimientos de su población;
2. Se considera que la escuela media ofrece el servicio a uno o varios
corregimientos, en atención a que la misma tiene una mayor cobertura
de población que la escuela primaria.
3. A los hospitales y centros de salud se les considerarán sus
demandas en sectores amplios, llegando en casos especiales hasta considerarse
a todo el distrito.
4. La norma para estadios nos obliga a considerar sus requerimientos a
nivel de uno o varios distritos.
5. Los gimnasios, piscinas y campos deportivos serán analizados
a nivel de 1 o varios corregimientos. Las mismas consideraciones se
aplicarán a las facilidades culturales.
Al hacer los agrupamientos
de corregimientos o distritos para analizar sus requerimientos, se considerarán
la proximidad y relación existente entre los mismos. Finalmente,
al proponer la ubicación de una determinada facilidad, se tendrán
en cuenta las propuestas sobre nodos y centros de empleo que se hacen
en cada uno de los escenarios, de manera que la dotación de los
servicios de equipamiento comunitario apoyen la estructura urbana propuesta.
Las facilidades requeridas
que se proponen por períodos, son adicionales a las existentes
en los anteriores y se estiman, con relación a los incrementos
de población estimados para cada nuevo período. _arriba
o Facilidades de
Educación
Entre los años
de 1995 y el 2005, el Área Metropolitana de Panamá necesitará
74 nuevas escuelas primarias, el 68.9% en el distrito de Panamá,
13.5% en San Miguelito y lo mismo en Arraiján; 4.1% en La Chorrera.
Se requerirán 36 escuelas medias, el 66.7% de las mismas en el
distrito de Panamá, 11.1% en San Miguelito, 13.9% en Arraiján
y 8.3% en La Chorrera.
En el mismo período,
el Área Metropolitana de Colón necesitará 18 escuelas
primarias, 17 en el corregimiento de Cristóbal y 1 en Cativá.
Además requerirá 9 escuelas de educación media en
Cristóbal.
Para los años
comprendidos entre el 2005 y el 2020, el Área Metropolitana de
Panamá requerirá 104 escuelas primarias, distribuidas de
la siguiente manera: el 62.5% en el distrito de Panamá, el 18.3%
en San Miguelito, 3.8% en Arraiján, 7.7% en La Chorrera y 7.7%
en Chepo. Además serán necesarias 52 escuelas medias, el
63.5% para el distrito de Panamá, 17.3% para San Miguelito, 3.8%
para Arraiján, 7.7% en Chorrera y lo mismo para Chepo.
Los requerimientos
del Área Metropolitana de Colón para este período
son: 23 escuelas primarias, 21 de estas para Cristóbal y 2 para
Sabanitas; 11 escuelas medias, 10 para Cristóbal y 1 para Sabanitas._arriba
Facilidades
de Salud
En el período
comprendido entre 1995 y 2005 el Área Metropolitana de Panamá
requerirá 1147 camas de hospital, 68.8% en el distrito de Panamá,
12.9% en San Miguelito, 10.5% en Arraiján y 7.8% en La Chorrea.
Necesitará 17 centros de salud, el 70.6% en el distrito de Panamá,
11.8% en San Miguelito, lo mismo que en Arraiján y 5.8% en La Chorrera.
El Área Metropolitana de Colón en el mismo período
requerirá 288 camas de hospital, de las cuales 265 se ubicarán
en Cristóbal y 23 en Sabanitas. Se requerirán además
4 centros de salud para Cristóbal.
Entre el 2005 y el
2020, el Área Metropolitana de Panamá demandará 1586
camas de hospital distribuidas de la siguiente manera: 63.4% en el distrito
de Panamá, 16.6% en San Miguelito, 3.6% en Arraiján, 8.9%
en La Chorrera, 7.5% en Chepo. De los 24 centros de salud necesarios,
el 62.5% se ubica en el distrito de Panamá, 16.7% en San Miguelito,
4.2% en Arraiján, 8.3% en La Chorrera e igual porcentaje en Chepo.
En dicho período
en el Área Metropolitana de Colón se requieren 348 camas
de hospital, 315 en Cristóbal y 33 en Sabanitas. Serán necesarios
5 centros de salud que deberán ubicarse en el corregimiento de
Cristóbal._arriba
Facilidades
de Recreación
Del año 1995
al 2005 el Área Metropolitana de Panamá requerirá
1 estadio en el distrito de Panamá; 9 gimnasios de los cuales 66.7%
se ubicarán en este mismo distrito, 11.1% en San Miguelito y el
mismo porcentaje en Arraiján y La Chorrera. De 8 piscinas, el 75%
se localizará en el distrito de Panamá, 12.5% en San Miguelito
y el mismo porcentaje en Arraiján. Se requieren 10 campos deportivos,
el 70% para el distrito de Panamá; el otro 30% deberá distribuirse
equitativamente entre San Miguelito, Arraiján y La Chorrera.
El Área Metropolitana de Colón en este período no
requerirá de estadios, pero sí de 3 gimnasios, 2 de estos
en Cristóbal y 1 en Cativá; 2 piscinas en Cristóbal
y 3 campos deportivos; 2 de estos últimos en Cristóbal y
1 en Cativá.
Entre el 2005 y el
2020, el Área Metropolitana de Panamá requerirá 2
estadios, 1 en el distrito de Panamá y otro en San Miguelito. De
12 gimnasios el 66.7% serán para el distrito de Panamá,
16.7% para San Miguelito, 8.3% para La Chorrera e igual porcentaje para
Chepo. Se necesitarán además 10 piscinas distribuidas así:
el 70% en el distrito de Panamá, 20% en San Miguelito y 10% en
Chepo. Finalmente, de 12 campos deportivos requeridos, el 75% se ubicará
en el distrito de Panamá, 16.7% en San Miguelito y 8.3% en Chepo.
En el mismo período
el Área Metropolitana de Colón requerirá 3 gimnasios,
3 piscinas y 3 campos deportivos, todos en el corregimiento de Cristóbal._arriba
Facilidades
Culturales
El Área Metropolitana
de Panamá durante el lapso comprendido entre 1995 y 2005 demandará
5 escuelas de educación artística, el 60% de las mismas
para el distrito de Panamá, el 20% para San Miguelito y lo mismo
para Arraiján. Se requerirán 2 museos, uno para el distrito
de Panamá y otro para San Miguelito; 2 teatros-auditorios, uno
para el distrito de Panamá y otro para el de San Miguelito. De
12 bibliotecas requeridas el 41.6% será para el distrito de Panamá,
el 25% para San Miguelito, el 16.7% para Arraiján e igual porcentaje
para La Chorrera.
Para este mismo período
el Área Metropolitana de Colón demanda 1 escuela de educación
artística y 6 bibliotecas, todas para el corregimiento de Cristóbal.
En el lapso del 2005 al 2020 el Área Metropolitana de Panamá
requerirá 6 escuelas de educación artística, 5 en
el distrito de Panamá y 1 en San Miguelito. Se requieren además
3 museos, 2 para el distrito de Panamá y 1 para San Miguelito y
3 teatros - auditorios, 2 en el distrito de Panamá y 1 en San Miguelito.
De 31 bibliotecas requeridas, el 61.3% es para el distrito de Panamá,
19.4% para San Miguelito, 3.2% para Arraiján, 9.7% para La Chorrera
y 6.4% para Chepo.
En dicho período
el Área Metropolitana de Colón requerirá 2 escuelas
de educación artística y 7 bibliotecas, todas en el corregimiento
de Cristóbal._arriba
Observaciones
Las instalaciones
comunitarias han sido estimadas considerando las áreas de expansión
urbana, la distribución de la población y las propuestas
de nodos de empleos que se han hecho para cada escenario en los períodos
señalados o sea, de 1995 al 2005 y del 2005 al 2020 .
A continuación
detallamos la tabla de los requerimientos y necesidades futuras de equipamiento
comunitario desde 1995 al 2005:
TABLA 14.3.3.6-1
REQUERIMIENTOS FUTUROS DE EQUIPAMIENTO COMUNITARIO
(1995-2005)
14.3.4 Programa
de Protección Ambiental
Esta sección
presenta una serie de recomendaciones de planificación y gestión
ambiental tendientes a enfrentar los problemas ambientales asociados con
el escenario seleccionado, dentro de la formulación del Plan Metropolitano.
Se identifican los problemas ambientales, al igual que las restricciones
para efectuar un manejo ambiental en el área metropolitana. En
la sección posterior de Controles Ambientales se recomiendan una
serie de políticas y acciones de fortalecimiento institucional
y organizacional, orientadas a establecer un desarrollo sustentable en
el corto, mediano y largo plazo. También se presentan directrices
de inversión de capital y gestión ambiental sectorial, así
como las prioridades en fortalecimiento institucional del control y la
vigilancia del componente ambiental del Plan Metropolitano. Por último,
se proponen acciones para el fortalecimiento organizacional del componente
ambiental de dicho Plan.
Para enfrentar los
problemas identificados, a continuación se establece el portafolio
de acciones que conforman el programa de protección ambiental del
Plan Metropolitano. Posteriormente se desarrollan recomendaciones para
enfrentar los problemas de contaminación ambiental, saneamiento
básico, conservación de recursos naturales y valoración
del patrimonio natural como recurso turístico. Las recomendaciones
que se presentan en esta sección complementan las iniciativas y
programas establecidos por el Gobierno Nacional, en julio de 1997, en
el "Plan de Acción Nacional de Salud Ambiental en el Desarrollo
Humano Sostenible para el Quinquenio 1998-2002". _arriba
14.3.4.1 Impactos
Ambientales y Portafolio de Recomendaciones
Desde el punto de vista ambiental, se propone contrarrestar la tendencia
de aumento de la contaminación ambiental y del crecimiento urbano
lineal desordenado, a través de la conformación de nodos
y de políticas que incentiven un uso sustentable del suelo y la
ejecución de actividades económicas basadas en sistemas
de producción limpia.
Para garantizar que las fuerzas del mercado se dirijan conforme al patrón
de desarrollo, tal como se explica en otros capítulos de este documento,
el Plan Metropolitano ha propuesto la descentralización de las
oficinas gubernamentales y de los centros educativos y centros de salud,
lo cual contribuirá a reducir impactos ambientales. La localización
de centros educativos y centros de salud en lugares cercanos a las zonas
residenciales, permitirá acortar los tiempos de viaje hacia estas
instalaciones. Si bien no resulta factible garantizar una total descentralización
en el corto plazo, mediante la instalación de servicios de salud
y educación en zonas cercanas a las residenciales, es razonable
que en el mediano y largo plazo se contribuya a una descentralización
de estos servicios, y a promover el direccionamiento del transporte a
nivel interno, entre los nodos o en dirección a la ciudad, cuando
se establezcan incentivos para restringir el transporte hacia el centro
de la ciudad. La localización de estos establecimientos alejados
del centro de la ciudad y situados estratégicamente en los nodos
de desarrollo propuesto en el Plan, reduciría los tiempos de transporte,
reduciendo así la cantidad de emisiones contaminantes.
En cuanto a los incentivos al transporte internodal, es fundamental controlar
la contaminación atmosférica mediante acciones de manejo
de la demanda del transporte. Para garantizar el control al crecimiento
urbano, así como la reducción en la tendencia de crecimiento
de las emisiones de contaminantes atmosféricos, el objetivo de
la estrategia de transporte se dirige a reducir el tiempo de viaje a los
sitios de trabajo, así como a disminuir el uso de vehículos
automotores particulares. En el sector transporte, la estrategia de acción
enfatiza la restricción al tráfico automotor particular
que se dirija al centro de la ciudad._arriba
- Impactos Ambientales Potenciales
Una vez se implemente
el Plan Metropolitano y el Gobierno inicie programas de regulación
ambiental sistemáticos, estos deberán estar dirigidos a
los problemas ambientales asociados con el plan de desarrollo, entre los
cuales vale la pena destacar:
La incidencia de enfermedades de origen hídrico, particularmente
gastrointestinales, como las diarreas infantiles, asociados probablemente
con problemas de cantidad y calidad de agua; la incidencia de enfermedades
de índole respiratoria y cardiovascular correlacionados probablemente
con problemas de la calidad del aire; así como las enfermedades
del oído y del sistema nervioso, que habrán de incidir de
manera directa en la población laboral, debido particularmente
a los altos niveles de ruido.
Los riesgos ambientales que amenazan la vida y la salud de los
panameños y que afectan la actividad económica y social.
Dentro de los riesgos a la vida de los panameños, se prevé
que se incluirán los asociados con la alta morbilidad y mortalidad
de peatones y conductores debido a los accidentes viales. También
se incluye el riesgo de aumento en las enfermedades tropicales asociadas
con el agua, que puede aumentar al disminuir las labores de desecación
de humedales y de control del crecimiento de mosquitos transmisores de
malaria, fiebre amarilla, dengue y otras enfermedades tropicales. De otra
parte, se señalan los riesgos ambientales asociados con los desastres
naturales tales como sismos, inundaciones, deslizamientos y otros, ocasionados
en buena medida por la inadecuada ubicación de asentamientos humanos
en sitios peligrosos. Adicionalmente, es factible identificar riesgos
potenciales asociados con "las áreas de desechos militares
que [el ejército de los Estados Unidos dispuso] en Emperador, Balboa,
Piña, y Sherman (más los que aún se desconocen) y
que por su cercanía a las áreas metropolitanas, sí
representan serias amenazas".
La calidad de vida, el confort y la tranquilidad de los panameños,
especialmente de aquellos que vivan lejos de sus sitios de trabajo, probablemente
continuarán siendo directamente perjudicados por las congestiones
o "tranques" del tráfico en las vías principales.
Estos problemas atentarán contra la calidad de vida de quienes
deban viajar varias horas al día entre sus viviendas y sitios de
trabajo.
La calidad de vida de los panameños también se
ve afectada por el déficit de espacios verdes y zonas recreativas.
La escasez de lugares recreativos y zonas verdes en las urbanizaciones
de la zona metropolitana se acentuará en ausencia de intervenciones
gubernamentales drásticas. Este déficit estará asociado
también con la alteración y, en algunos casos, con la destrucción
de ecosistemas naturales sensibles. Tal es el caso de algunos bosques
primarios y zonas de manglar, así como zonas frágiles de
la cuenca hidrográfica del río Chagres. Los procesos de
degradación de ecosistemas naturales restringirán el acceso
a los sitios naturales con usos potenciales de ecoturismo.
Los riesgos de un crecimiento urbano desordenado que se extienda
e invada los suelos dentro de la cuenca que sirve al Canal y que abastece
de agua a los asentamientos circunvencinos. Esta situación es particularmente
crítica en la cuenca del Río Chagres, pues el crecimiento
urbano en la zona metropolitana afecta de manera directa los ecosistemas
asociados con el río Chagres, y este a su vez es un ecosistema
estratégico para la sustentabilidad del Canal Interoceánico.
Los efectos sobre "el ámbito sociocultural del hábitat
urbano [...que incluyen] el producido por la pérdida de la capacidad
de la población para el convivio o el crear "comunidad"
en el sentido más estricto, a nivel de vecindarios, barrios y espacios
públicos colectivos. Este tipo de déficit ambiental afecta
especialmente a la población femenina y de niños, con incidencias
manifiestas en indices de inseguridad" Las deficiencias en la calidad
y cantidad de los sitios recreativos y en las zonas verdes afecta directamente
a las personas que encuentran en esas zonas sitios que permiten la recreación
pasiva y a la vez contribuyen a mejorar la convivencia y por tanto el
sentido de comunidad. El déficit de zonas recreativas y de zonas
verdes, restringe las posibilidades de interacción entre los grupos
poblacionales mencionados._arriba
-
Portafolio de Acciones y Programas Ambientales
Con base en la identificación
de los problemas ambientales descritos anteriormente y explicados en detalle
en el Documento Técnico No. 4, el portafolio de acciones prioritarias
en protección ambiental en la regulación ambiental puede
dirigirse a cinco programas principales:
contaminación
hídrica y manejo de residuos sólidos,
contaminación atmosférica,
contaminación por ruido,
saneamiento básico, prevención de riesgos y planificación
y gestión ambiental,
reforestación, y conservación de recursos naturales
y turismo en áreas naturales.
Contaminación Hídrica y Manejo de Residuos Sólidos
Del análisis
ambiental estratégico presentado por el Consorcio en los Documentos
Técnicos No. 1 al No. 4, se deduce que el manejo de los residuos
líquidos y residuos sólidos es prioritario para disminuir
los altos índices de morbilidad y mortalidad asociados con enfermedades
de origen hídrico o transmitidas por vectores asociados con residuos.
Esta sección analiza en primera instancia una serie de acciones
recomendadas para el control de la contaminación hídrica.
Posteriormente, se analizan una serie de recomendaciones técnicas
y económicas para el manejo y disposición final de las basuras.
La atenuación de los problemas de salud pública asociados
con el agua se pueden enfrentar con acciones para aumentar la cobertura
en la prestación de los servicios de saneamiento, reducción
en la producción de residuos líquidos, educación
ambiental e inversión en infraestructura de manejo de desechos.
En esta dirección, dentro de las acciones técnicas recomendadas
para el control de la contaminación hídrica, se incluye
el aumento de cobertura de sistemas de saneamiento, mediante la descentralización
del manejo de los residuos líquidos a través de sistemas
que aprovechen la infraestructura instalada y que a la vez consoliden
el modelo de crecimiento establecido en el Plan Metropolitano.
Los problemas de morbilidad y mortalidad asociados con enfermedades de
origen hídrico se relacionan con las deficiencias en la calidad
y cobertura de los servicios de saneamiento en la zona metropolitana.
La baja cobertura de los servicios de alcantarillado y la inexistencia
de sistemas de tratamiento de aguas residuales se correlaciona con los
casos de enfermedades gastrointestinales e infecciosas. En el área
metropolitana no existe control alguno de la contaminación hídrica.
En el casco viejo el sistema de alcantarillado es combinado. En la zona
central de la ciudad, el sistema está segregado en canales de agua
lluvia y aguas residuales. Siete colectores descargan aguas residuales
a la Bahía, en las zonas de El Chorrillo, Santa Ana, Calidonia,
Bella Vista, San Francisco y Parque Lefevre. Las descargas restantes del
alcantarillado se vierten directamente a las quebradas y ríos locales.
Las urbanizaciones establecidas en las últimas décadas descargan
sus aguas residuales en pozos sépticos. Posteriormente, el agua
residual se arroja a las quebradas y ríos circunvecinos. Los ríos
y quebradas que reciben las descargas de aguas residuales se han convertido
en cuerpos de agua anaérobicos: alcantarillas a cielo abierto.
El patrón de crecimiento y la longitud de la ciudad promovieron
el desarrollo de un sistema de drenaje y de evacuación de aguas
residuales basado en pozos sépticos y descargas directas a las
quebradas y ríos aledaños. Las deficiencias en el mantenimiento
de las alcantarillas y de los canales abiertos se sumaron a las constantes
descargas de basuras y residuos en las quebradas y cuerpos de agua. Colmados
los sistemas de drenaje, se produce el rebose de canales y alcantarillas,
lo que a su vez ocasiona las precarias condiciones de saneamiento en diferentes
zonas de la ciudad.
En la zona metropolitana no se utiliza la limpieza periódica de
los pozos sépticos. La contaminación de los acuíferos
por descargas de pozos sépticos colmados, puede constituir un problema
crítico. Sin embargo, no hay estudios sobre la magnitud y localización
de la contaminación bacterial de aguas subterráneas. De
manera análoga, es muy factible que la contaminación bacterial
afecte las tuberías que transportan agua potable. Tanto las quebradas
existentes, como los ríos Curundú, Río Abajo, Juan
Díaz y Matías Hernández, y la misma Bahía
de Panamá, están sometidos a las descargas de aguas residuales
municipales e industriales generadas en el área metropolitana.
El desarrollo del sistema de alcantarillado y tratamiento de aguas residuales
en nodos permite la posibilidad de independizar y subdividir en zonas
el sistema de drenaje y evacuación de residuos, maximizando así
su confiabilidad. La probabilidad de ocurrencia de fallas que afecten
el sistema total sería mínima. Los desarrollos de los nodos
deben incluir el tratamiento de aguas residuales de la zona de influencia
de sus descargas; es decir, en las microcuencas localizadas en el área
de influencia. Estos sistemas de tratamiento consistirían fundamentalmente
en sistemas de tratamiento anaeróbico, filtrado rápido y
desinfección. De esta manera, se garantizaría que el número
más probable de coliformes en las aguas residuales no supere los
1000/100 ml.
Los sistemas de drenaje pluvial también se establecerían
por módulos a nivel de zonas de cada nodo. Durante los primeros
meses de 1998, el MIPPE estará contratando los diseños del
sistema de drenaje pluvial, alcantrillado y tratamiento de aguas residuales.
Para contribuir al estudio (que contratará el MIPPE para el diseño
del alcantarillado en la zona metropolitana) el Plan sugiere una serie
de recomendaciones específicas, como el que la evacuación
de las aguas de lluvias se haga, en todos los casos, de manera independiente
con respecto a las aguas residuales, procurando evitar la contaminación
por causa de los contaminantes en la escorrentía o el derrame accidental
de materiales contaminantes (p.e. aceites, lubricantes usados, etc.).
Asimismo, se deben establecer sistemas de tratamiento primario para cada
una de los sistemas de evacuación de aguas lluvias. Por otro lado,
la construcción de sistemas modulares independientes para el drenaje
pluvial en cada zona en que se subdividan los nodos, debe dirigirse a
minimizar costos y a la vez a disminuir los riesgos de contaminación
hídrica.
Algunas enfermedades de origen hídrico se propagan por deficiencias
en los hábitos higiénicos. El lavado de las manos y la higiene
en la manipulación de alimentos resultan básicos para prevenir
la incidencia de tales enfermedades, como la gastroenteritis. Un mecanismo
efectivo para promover los hábitos higiénicos en la manipulación
de alimentos es la educación ambiental. El uso de campañas
educativas a nivel escolar, así como en los diferentes medios de
comunicación, puede contribuir a disminuir la incidencia de enfermedades
de origen hídrico.
Para promover técnicas de uso eficiente del agua en las zonas metropolitanas,
los programas de educación ambiental comprenderían, fundamentalmente,
la detección y reparación de fugas, las restricciones al
uso de artefactos que utilicen agua en exceso y el incentivo de los artefactos
sanitarios de bajo consumo. El control de fugas de agua en las redes de
abastecimiento de agua potable puede significar reducciones de demanda
de agua de hasta un 50%. La detección de fugas en las instalaciones
de baños o cocinas también contribuye a disminuir la demanda
por este concepto hasta en un 50%.
La ineficiencia en el uso de los recursos hídricos en los diferentes
sectores provoca efectos ambientales significativos, en términos
de disponibilidad de agua y de infraestructura para atender demandas insatisfechas.
Estos efectos se dejan sentir en el sector económico, al desviar
recursos con fines improductivos, y en la ecología, por las consecuencias
sobre el medio, que resultan de los volúmenes no aprovechados.
Entre las causas que ocasionan la ineficiencia en el uso de los recursos
naturales, entre los que se incluye el agua, figura la falta de educación
y la falsa creencia de que estos recursos son eternos y gratuitos. De
este modo, se permiten pérdidas y fugas en el sistema de producción
y distribución, pérdidas en los artefactos y dispositivos
domiciliarios e industriales que hacen uso del agua tratada, y se propagan
sin sanción los hábitos inadecuados de los propios usuarios.
Las pérdidas en la etapa de producción de agua potable son
significativas en la zona metropolitana. El consumo medio real, con base
en los resultados de sistemas que operan con micromedición y en
los que se cobran tarifas similares al costo marginal, se estima en 180
ltr/hab/día. Si esta cifra se compara con la producción
total de agua per cápita promedio de la zona metropolitana, de
cerca de 350 ltr/hab/día, se concluye que el nivel medio global
de pérdidas es del orden del 50%. Estas pérdidas se deben
a las fugas en las redes y tomas domiciliarias, imprecisión en
la medición o falta de ella, y a la no contablización del
agua que se usa para servicios municipales y de emergencia. Las fugas,
en general, dependen de los tipos de suelo, la calidad del agua y de la
construcción, los materiales usados, las presiones, la edad de
la red y las prácticas de operación y mantenimiento.
Dado que en términos generales, cerca del 70% del agua de una ciudad
es consumida a nivel domiciliario, cobra suprema importancia el uso eficiente
del recurso hídrico a nivel de cada habitación. Las características
de los artefactos sanitarios, su estado de mantenimiento junto con el
de las redes interiores y los hábitos de los usuarios, son los
factores principales que determinan el nivel de pérdidas y el uso
irracional del agua. En Panamá, no se dispone de información
sobre el valor típico de consumo diario de agua por habitante en
las diferentes zonas de la región metropolitana, como tampoco sobre
la distribución de ese volumen por destino.
El manejo de residuos sólidos es uno de los que influencia de manera
drástica el modelo de desarrollo. Entre más dispersos estén
los asentamientos humanos, mucho más difícil es suministrar
un sistema de recolección y disposición de desechos sólidos.
La dispersión lineal contribuye a aumentos en los costos de capital,
operación y mantenimiento. Para garantizar un manejo efectivo de
las basuras, y a la vez para evitar la dispersión lineal del crecimiento
urbano, se recomienda la localización de nuevos rellenos sanitarios
en los nodos de La Chorrera, José Domingo Espinar y Colón.
Igualmente, se recomiendan vertederos controlados en Chepo y en Capira,
y un plan maestro para el relleno sanitario existente de Cerro Patacón,
en la Ciudad de Panamá. Para minimizar el costo de recolección
y transporte, se recomienda el establecimiento de estaciones de transferencias
en zonas cercanas a los centros de gravedad de producción de basura.
Los nodos densificados de Tocumen, Espinar, Colón, Clayton o Albrook,
y La Chorrera permitirían disminuir el desgaste de los equipos
recolectores debido a las distancias más cortas de viaje para atender
a la población. Los lugares en donde se han establecido rellenos
sanitarios, o en los cuales se ha recomendado la instalación de
sitios de disposición final de basuras, se señalan en el
Mapa 14-18. _arriba
Contaminación Atmosférica
La contaminación
atmosférica, así como la alta accidentalidad vial, las congestiones
del tráfico y las inundaciones periódicas en por lo menos
21 sitios, se han acentuado por razón del desordenado modelo de
crecimiento que ha sufrido la ciudad de Panamá. La concentración
de actividades económicas en los corregimientos del centro de la
ciudad, se ha visto acompañada por la localización de zonas
residenciales sobre la vías que entran y salen del centro, particularmente
las vías Transístmica, Domingo J. Alfaro y la vía
a Tocumen. La longitud de los viajes entre las zonas residenciales y los
sitios de trabajo ha aumentado hasta llegar a más de 30 kilómetros.
La contaminación atmosférica ha aumentado en la medida en
que se ha dado el crecimiento urbano lineal. Se resalta el "impacto
que también pueden ocupar, en los mismos ámbitos de contaminación
y calidad de vida, los incrementos en tiempo de estos viajes, producto
de la congestión, lo que pone los motores a trabajar más
intensa y menos eficientemente, y que reduce la disponibilidad de tiempo
para fines laborales o personales de los habitantes".
Arterias como la Vía España o la Transístmica se
han sometido a una gran demanda de tráfico automotor. En algunas
vías, el tráfico supera los 5,000 vehículos por hora.
El patrón de desarrollo desestimula otros medios de transporte
como las vías peatonales, las bicicletas y demás vehículos
no motorizados. Con pocas excepciones, el diseño y operación
de las vías no incluye puentes peatonales o calzadas para uso de
bicicletas u otros vehículos no motorizados.
El patrón del futuro desarrollo propuesto en el Plan Metropolitano
atraerá actividades económicas y empleos localizados mucho
más cerca de los sistemas de distribución existentes. Esto
maximizará el grado al cual la infraestructura vial existente pueda
ser integrada con las mejoras requeridas para servir a la población
futura, minimizando a la vez la emisión de contaminantes atmosféricos
Las principales fuentes de contaminación atmosférica en
el área metropolitana están constituidas por el transporte
automotor y las industrias. Para enfrentar los problemas de contaminación
atmosférica, las estrategias más efectivas están
relacionadas con programas de manejo de demanda del transporte y mejoras
en la eficiencia energética industrial.
La demanda de transporte diaria en la zona metropolitana se sitúa
en una cifra cercana a medio millón de viajes diarios (en un gran
porcentaje por automotores con baja ocupación que ingresan en la
mañana al centro de la ciudad y salen hacia San Miguelito, Tocumen,
Arraiján y La Chorrera en la tarde). Para garantizar una manejo
efectivo en la demanda del transporte, la estrategia que se puede utilizar
es la de desincentivar el uso del automóvil individual y sustituirlo
por sistemas de transporte masivo.
El control de la contaminación industrial ha de dirigirse a exigir
la minimización en la emisión de contaminantes atmosféricos
generados por las industrias, como por ejemplo, las partículas
en suspensión y los óxidos de azufre. De manera complementaria,
se exigiría el control de las emisiones mediante sistemas como
filtros electrostáticos, filtros de manga, scrubbers, etc._arriba
Contaminación
por Ruido
Los automotores y
las actividades comerciales son la principal fuente de ruido ambiental
en la zona metropolitana. Mediciones efectuadas por Dames & Moore
y ICF Kaiser detectaron algunos sitios donde los niveles de ruido están
por encima de 65 dbA. La inadecuada construcción y mantenimiento
de los sistemas de infraestructura también tiene efectos sobre
la salud humana, pues contribuyen a elevar los niveles de ruido. El uso
de taladros para la apertura de zanjas en vías urbanas eleva de
manera significativa el nivel de ruido y altera la tranquilidad ciudadana.
A nivel industrial, el uso de compresores y otros equipos también
genera altos niveles de ruido._arriba
Saneamiento Básico, Prevención de Riesgos y
Planificación y Gestión Ambiental
Los programas de control de la contaminación hídrica y atmosférica,
así como los programas de conservación de recursos naturales,
han de articularse para garantizar mejoras en la calidad de vida de los
panameños, con programas que promuevan el saneamiento básico,
la prevención de riesgos y la planificación y la gestión
ambiental. Los programas de saneamiento básico incorporan desde
acciones de control de vectores hasta campañas de educación
ambiental e higiene básica. Los programas de prevención
de riesgos constan de acciones para minimizar la incidencia de desastres
naturales y establecer medidas de control de emergencias potenciales.
Adicional a los programas de prevención de riesgos y saneamiento
básico, se requiere el establecimiento de un programa de planificación
y gestión ambiental, basado en la participación ciudadana.
Esta participación se garantiza con la difusión expedita
de información, para lo cual se recomienda establecer un sistema
de divulgación ambiental metropolitano._arriba
Saneamiento básico
Las inundaciones periódicas en diferentes sitios del área
metropolitana, así como la falta de mantenimiento de alcantarillas
y sistemas de drenaje de pozos y humedales, pueden contribuir a aumentar
el crecimiento de mosquitos transmisores de malaria, fiebre amarilla,
dengue y otras enfermedades tropicales. Por lo tanto las autoridades gubernamentales
han de prevenir y controlar los brotes que puedan presentarse de casos
de morbilidad y mortabilidad asociados con tales flagelos.
Los riesgos ambientales amenazan la vida y la salud de los panameños
y afectan su actividad económica y social. La alta mortalidad de
peatones y conductores se debe a los accidentes viales. Las inundaciones
periódicas de 21 sitios del área metropolitana afectan de
manera directa las actividades económicas urbanas, particularmente
la salud pública, el comercio, el transporte y la educación.
La calidad de vida, el confort y la tranquilidad de los panameños,
se ven directamente perjudicados por las congestiones o "tranques"
del tráfico en las vías principales, a raíz de inundaciones
en épocas de invierno. Todo esto atenta contra la salud pública
y contra la calidad de vida de los panameños.
Los problemas actuales de inundación en cuencas como la de los
ríos Juan Díaz, Caimito y Matías Hernández,
tenderán a exacerbarse, de no establecer sistemas de drenaje con
suficiente capacidad a nivel de los nodos propuestos. Como se discute
en la sección relacionada con la conservación de recursos
naturales, el desarrollo de infraestructura sanitaria ha de acompañarse
con la aplicación de las políticas que regulan el desarrollo
en cuencas hidrográficas, y será particularmente necesaria
para minimizar el creciente impacto sobre el funcionamiento de estas cuencas
urbanas y sus consecuencias._arriba
-Planificación
y gestión ambiental
A la par con la formulación
de programas de prevención de riesgos y saneamiento básico,
se requiere el establecimiento de un programa de planificación
y gestión ambiental basado en la participación ciudadana.
El programa de planificación y gestión ambiental tendría
cuatro componentes principales. El primer componente corresponde al programa
de evaluación de impacto ambiental, el segundo al montaje de un
programa de diseño y aplicación de normas ambientales, el
tercer componente corresponde al programa de participación ciudadana
y el cuarto componente se basa en el montaje de un sistema de información
ambiental en desarrollo de actividades de monitoreo y seguimiento, auditoría
ambiental y evaluación ex post.
-
Evaluación de Impacto Ambiental
El procedimiento
administrativo establecido legalmente en la República de Panamá
para incorporar la dimensión ambiental en los procesos de planificación,
es el de las evaluaciones de impacto ambiental. El sistema de evaluación
de impacto ambiental se ha utilizado en las fases de diseño y construcción
de proyectos de infraestructura vial y energética. El programa
de evaluación de impacto ambiental reestructurado puede utilizar
como antecedentes las regulaciones y guías establecidas por el
INRENARE. Sin embargo, es conveniente enfatizar la participación
de la ciudadanía en los procesos de toma de decisión que
efectúen las agencias gubernamentales. El programa de evaluación
de impacto ambiental se dirigiría a garantizar la apertura de los
procesos de decisión al escrutinio público.
El Plan Estratégico
de Desarrollo Metropolitano incluye un programa de zonificación
del uso del suelo, que define estándares de localización
de diferentes actividades económicas, así como la ubicación
de los proyectos de infraestructura más importantes. La adopción
sistemática del plan de usos del suelo evitará que se exijan
estudios de impacto ambiental para proyectos que cumplan con las normas
de zonificación y los estándares de calidad ambiental. El
sistema de evaluación de impacto ambiental se requeriría
para propuestas de rezonificación o modificación de dicho
Plan.
El mayor porcentaje
de los proyectos de desarrollo que se van a efectuar en el área
metropolitana deberían manejarse mediante especificaciones técnicas
ambientales. Estas incluyen todas aquellas acciones de manejo ambiental
factibles de definir con carácter general para la ejecución
de los proyectos, obras y acciones contempladas en el Plan Metropolitano.
Dentro de las especificaciones
técnicas ambientales se establecen los procedimientos para cumplir
con las normas ambientales vigentes. Ello incluye, entre otros, el cumplimiento
de normas de señalización durante la construcción,
manejo de taludes, control de la contaminación hídrica,
contaminación atmosférica, control del ruido, manejo de
residuos sólidos y control de contingencias. Las especificaciones
técnicas ambientales deben constituirse en un componente de los
contratos de construcción, operación y mantenimiento de
obras de desarrollo metropolitano.
A nivel mundial, el
sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) se utiliza con
los siguientes criterios:
Considerar
proyectos alternativos para la ejecución de proyectos, acciones,
programas y obras.
Abrir los procesos de decisión al escrutinio público.
Identificar efectos ambientales significativos de las alternativas
examinadas.
Sopesar la escogencia de la alternativa a ejecutar, a la luz
de consideraciones ambientales.
Establecer planes de mitigación de efectos, dentro de
planes de manejo ambiental.
Los objetivos de las
EIA deben incorporase de manera explícita en la planificación
y gestión de proyectos, obras y actividades a desarrollar en el
área metropolitana. Su exigencia debería garantizar las
consideraciones de diferentes alternativas de diseño, las identificaciones
ambientales para cada alternativa y la participación de la ciudadanía
en los procesos de decisión de proyectos sectoriales. _arriba
Gestión
Ambiental
El programa de gestión
ambiental incluye el montaje de programas de producción limpia
en los diferentes sectores productivos. Los programas de producción
limpia propuestos se basan en procesos de optimización del uso
de recursos y abarcan el uso de insumos, procesos unitarios y operaciones
unitarias que minimicen la generación de residuos. Estos sistemas
también incluyen el uso de sistemas de control y mitigación
de impactos ambientales. En algunos casos se incorporan cambios en los
diseños de los productos y tecnologías de uso final.
Participación
Ciudadana
La incorporación
de la sociedad en los procesos de planificación y gestión
de acciones de desarrollo debería contribuir a balancear el patrón
de crecimiento. Para garantizar la participación ciudadana se proponen
dos instrumentos principales, consistentes en instrumentos jurídicos
y en un sistema de información ambiental.
Varios instrumentos
jurídicos fomentan una participación efectiva de la ciudadanía
en las acciones de desarrollo urbano. Dentro de los instrumentos jurídicos
que se pueden adoptar para fortalecer institucionalmente el Plan Metropolitano,
figuran dos fundamentales: (1) garantizar el derecho a la información
y (2) permitir acciones populares y acciones de cumplimiento.
El derecho a la información
permite a la ciudadanía conocer las acciones, proyectos y obras
que planifica o ejecuta el Estado. Por ejemplo, cualquier ciudadano que
lo solicite debería recibir información inmediata sobre
los planes oficiales de localización, presupuesto, financiación
o desarrollo de obras de infraestructura. En el mismo tenor, todas y cada
una de las actuaciones de los funcionarios gubernamentales deberían
estar disponibles para el escrutinio público, sin requerimientos
que sobrepasan una petición oral o escrita.
Las acciones populares
dan derechos a los ciudadanos para exigir, a nombre del interés
público, medidas de control a terceros, cuando exista la suposición
de que va a desmejorarse su calidad de vida. De manera análoga,
las acciones de cumplimiento, otorgan derechos a las comunidades para
que, en nombre del interés público, hagan cumplir las funciones
y las responsabilidades asignadas a las autoridades gubernamentales._arriba
Sistema
Metropolitano de Información Ambiental y Evaluación de la
Gestión
Hay deficiencias marcadas en la cantidad y la calidad de la información
ambiental en la zona metropolitana. Para enfrentar estas deficiencias
se ha propuesto un sistema de información ambiental, que permita
recolectar información confiable y difundirla, de manera efectiva,
a la población de la región metropolitana. La planificación
de los proyectos y el control de gestión de los objetivos establecidos
por política ambiental, en particular los referentes a la contaminación
ambiental, la salud pública y el uso racional de los recursos naturales,
requieren una base de información comprensiva y actualizada.
El objetivo del sistema
metropolitano de información ambiental debe identificar y establecer
los mecanismos institucionales y organizacionales apropiados para superar
en forma progresiva la ausencia, insuficiencia e inconsistencia de información
sistemática básica sobre la calidad del entorno, las características
y condiciones de los sistemas existentes. De igual manera, el sistema
de información ambiental debe permitir consolidar una base de datos
con los indicadores de interés ambiental relacionados con los componentes
del medio natural, socioeconómico y cultural, en el ámbito
de influencia de los distintos servicios._arriba
Monitoreo,
Seguimiento, Auditoría y Evaluación Ambiental Ex post
Para garantizar la mejora continua en las acciones de planificación
y gestión ambiental se requiere el establecimiento de acciones
de evaluación sistemática delcumplimiento de metas. Dentro
de estas acciones se incluye el montaje de programas de monitoreo ambiental,
seguimiento, auditoría ambiental y evaluación ambiental
ex post.
Las acciones de monitoreo ambiental tienen por objeto la recolección
de información sistemática y su comparación con los
criterios y estándares de calidad establecidos. Las acciones de
auditoría ambiental permiten evaluar de manera periódica
la eficiencia de los programas de gestión ambiental en marcha.
Los programas de evaluación ex post se dirigen a evaluar la efectividad
de los programas de planificación y gestión ambiental.
La evaluación del cumplimiento de objetivos debe programarse de
manera periódica y sobre metas precisas, preferiblemente de índole
cuantitativa. Para garantizar el cumplimiento de los objetivos de la política
se puede establecer un mecanismo de revisión periódica de
la dimensión ambiental, de acuerdo con la propuesta de monitoreo
y evaluación del Plan Metropolitano, descrita posteriormente en
la sección 13 del presente documento, bajo las metas y criterios
que se establezcan en consenso entre los grupos de producción,
el gobierno y la comunidad._arriba
Reforestación, Conservación de Recursos Naturales
y Turismo en Áreas Naturales
Hay un déficit de zonas verdes, y zonas recreacionales en las zonas
urbanizadas del área metropolitana. Para contrarrestar este déficit,
el sistema de espacios abiertos propuesto en este documento en el Capítulo
14.3.1 se dirige a garantizar la preservación y el uso de zonas
verdes, parques regionales y unidades de conservación a nivel regional.
Áreas verdes urbanas y bosques de galería
En la actualidad se exige a los urbanizadores dedicar el 5% de las áreas
a la creación de zonas verdes. Las normas de urbanización
no establecen mecanismos que garanticen la arborización o el acceso
de los habitantes de la barriadas a dichas zonas. Es urgente el desarrollo
de normas específicas con las que se aumente el porcentaje del
área que se exige a los urbanizadores como zonas verdes. Este porcentaje
debería aumentarse hasta niveles que oscilen entre el 25 y el 35%,
dependiendo de la densidad propuesta en la zonificación. Además
debido a que las "normas de urbanización no establecen mecanismos
que garanticen la arborización o el acceso de los habitantes de
las barriadas a dichas zonas [se debe hacer] hacer mención del
"valor de uso" sobre estos espacios, condición a la que
debieran asociarse indicadores de evaluación" . Conforme a
los expertos ambientales del MIVI y los asesores de PNUD que supevisan
la formulación del Plan Metropolitano, los urbanizadores generalmente
asignan a las zonas verdes terrenos en que se dificulta el uso por parte
de los ciudadanos de las Áreas, en razón a condiciones topográficas
o de localización. La asignación del 25 al 35% de los terrenos
a urbanizar, a zonas verdes debe garantizar que se maximice el valor de
uso de estas áreas de manera tal que sea fácil para los
habitantes acceder a los sitios correspondientes y hacer el mejor uso
de las áreas dedicadas a la recreación pasiva.
Las leyes de la República
de Panamá establecen que los parques y zonas verdes urbanas sean
administrados por las Alcaldías. Sin embargo, las normas no definen
con precisión aspectos como la propiedad, la operación y
el mantenimiento de las áreas verdes de cada barriada. Por esta
razón, estos aspectos deben determinarse mediante normas precisas.
De igual manera, deben establecerse exigencias de arborización
de zonas urbanizadas y por urbanizar. La arborización, reforestación
y el aumento de áreas verdes en las zonas que se urbanizan permitirán
restringir el avance de las ondas de sonido, mitigando el ruido ambiental
y, a la vez, aumentando la capacidad de retención de agua de escorrentía,
con lo que se disminuirían los picos de caudal en épocas
de lluvias.
La cobertura vegetal está relacionada con el microclima en las
diferentes zonas del área metropolitana. La tasa de recarga de
acuíferos y los fenómenos de evapotranspiración son
función del tipo de cobertura vegetal y de las características
climáticas regionales. La presencia de una cobertura vegetal boscosa
facilita la infiltración del agua, porque amortigua la violencia
de su caída, ofrece una resistencia mecánica a su desplazamiento
y proporciona, por medio de las raíces, canales de entrada hacia
el interior del suelo. La arborización, la reforestación,
y la mayor cobertura de áreas verdes en zonas urbanizadas, permitirá
garantizar que el microclima natural en los ecosistemas se mantenga, y
de esta manera se evite el aumento de temperatura en las zonas que se
desarrollen para actividades residenciales, comerciales, institucionales
e industriales.
Se considera importante atender el efecto de la masa edilicia urbana con
los patrones de diseño y construcción asociados. Estos efectos
están relacionados particularmente con la alteración de
las condiciones naturales y del microclima regional. Si bien es cierto
que hay dificultad para mitigar efectos ambientales sobre espacios construidos,
es factible establecer controles que garanticen el aumento de la cobertura
vegetal en las zonas urbanizadas y en aquellas que se vayan a urbanizar.
Efectivamente, muchos de estos problemas pueden y deben ser referidos
a controles normativos que incidan sobre patrones de construcción,
es decir, que están bajo posibilidad de control. La mitigación
de los efectos asociados con la masa edilicia urbana se enfrentará
con el aumento de las zonas verdes, la disminución en la densidad
en zonas de concentración de asentamientos poblacionales, el aumento
de la reforestación, la apropiación del espacio público
para el control de desastres (p.e. inundaciones, deslizamientos, etc),
y el control de los procesos de escorrentía, mediante obras de
avenamiento y drenaje.
El programa de establecimiento de zonas verdes se complementa de acuerdo
con el Sistema de Espacios Abiertos (SEA), descrito en el Capítulo
14.3.1 de este documento. Tal como se contempla en esa sección,
la necesidad de "normar de modo preciso la propiedad, la operación
y el mantenimiento de las áreas verdes de cada barriada, debe ser
elevado a a la escala del SEA de orden macrourbano, pues se entra a una
dimensión en donde las responsabilidades sobre estos mismos aspectos
corren el riesgo de quedar diluidas en el contexto institucional"
. En relación a las diferentes modalidades alternativas de propiedad
y de administración de espacios, verdes y parques urbanos se pueden
citar las experiencias de ciudades como Cali o Puerto Triunfo, en Colombia,
o Palo Alto en Estados Unidos, en los cuales la propiedad de las zonas
verdes y recreativas es de empresas privadas asociadas para el establecimiento
de dichas áreas. En el caso de Cali, la Asociación de Industrias
de Procesamiento de Azúcar (ASOCAÑA) ha establecido parques
y zonas recreativas urbanas que benefician a la ciudadanía y que
se financian mediante el cobro de tarifas de ingreso. En otras ciudades,
como por ejemplo Palo Alto, el acceso a los parques urbanos se limita
a los habitantes registrados en la ciudad, los cuales deben demostar el
pago de impuestos municipales o el pago de tarifas de servicios publicos
para acreditar su ingreso a dichos lugares._arriba
Áreas
recreativas (parques distritales, parques vecinales, cintas costeras,
plazas)
La calidad de vida de los panameños también puede mejorarse
de manera ostensible si se establecen parques infantiles, parques recreacionales
y canchas deportivas en las diferentes barriadas. El establecimiento de
estas zonas permitirá apropiar el espacio público y hacer
las áreas verdes accesibles a la ciudadanía metropolitana.
Los estándares
especificados en las normas de zonificación deben precisar el equipamiento
mínimo de los parques y áreas recreativas. Ello no sólo
se refiere a la capacidad de las instalaciones para recreación
infantil o prácticas deportivas, sino también a las características
singulares y la densidad de la vegetación seleccionada.
Además, los
estándares de zonificación deben permitir a los panameños
la posibilidad de utilizar vías peatonales para actividades domésticas
y recreativas. A nivel de barriada y de corregimiento, los estándares
contemplarán el establecimiento de vías exclusivas para
peatones, bicicletas y vehículos no motorizados.
En la mayoría
de los casos, las pocas áreas verdes y recreacionales establecidas
recientemente las han desarrollado los constructores, y la Alcaldía
se encarga del mantenimiento de las mismas.
Áreas protegidas regionales (parques ecológicos,
reservas ecológicas, reservas silvestres)
Se han identificado
ecosistemas locales ambientalmente frágiles, ubicados dentro del
área de influencia del Plan Metropolitano. Estas áreas deberían
ser apropiadas para la comunidad, de manera tal que, a través de
mecanismos participativos, se garantice su preservación.
Consorcio
D&M/HLM/WRT/YEC/PW
Informe Final del Plan Metropolitano
22 de diciembre de 1997"Plan
de Desarrollo Urbano de las Áreas Metropolitanas del
Pacífico y del Atlántico"
Ministerio de Vivienda - República de Panamá
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