|
5.0 EL ÁREA
DE INTERVENCIÓN
En este capítulo
del estudio se explica el proceso de selección del área
física de la ciudad de Colón, que servirá para la
aplicación del Modelo de intervención que se define con
este Plan de Acción Local. Se hace, igualmente, una descripción
de los límites o ámbito de ejecución del Plan, y
también se presentan los datos y características más
relevantes del área seleccionada que son pertinentes para la definición
de las acciones requeridas o políticas específicas, a manera
de una base geográfica de datos.
5.1 Delimitación y Descripción General
El área para
la aplicación del Plan de Acción Local (PAL) comprende 18
manzanas localizadas en la parte central-occidental de la Isla, entre
el Paseo del Centenario y la Avenida del Frente (Ver Mapa Nº 5) y
entre la calle 8ª y la calle 11ª, a ambos lados del límite
entre Barrio Norte y Barrio Sur. Es una zona que representa la típica
característica urbana de la ciudad de Colón: viejas casonas
de inquilinato, antiguas edificaciones de arquitectura con valor histórico,
mediana y alta concentración poblacional, intensa actividad comercial
y de servicios. Se estima que residen cerca de 4,710 personas, según
datos obtenidos de la Dirección de Estadística y Censo.
5.2 Criterios de Justificación
El proceso de selección
de un área específica para la implantación del Plan
de Acción Local, para la Isla de Manzanillo, se basó primordialmente
en la sectorización descrita en el capítulo anterior. Al
compararse los distintos subsectores, con sus respectivas políticas
urbanas, con los objetivos generales que el Plan Metropolitano establece
para la ciudad de Colón se llegó a la conclusión
de que el subsector que mejores características presenta para el
cumplimiento de dichos objetivos es el subsector Nº 1 Casco Viejo,
en primera instancia, y el subsector Nº 2, Casco Urbano, en segundo
orden.
A partir de esta primera
aproximación el proceso se orientó a seleccionar aquellas
manzanas cuyas características actuales y potenciales permitiesen
el diseño de un Plan Piloto o Modelo de Acción que pudiese
posteriormente repetirse en otras áreas de la Isla. En este sentido,
algunos rasgos o variables que se consideró no tan determinantes
en la decisión, fueron, por ejemplo, la tenencia y el valor de
la tierra, aunque la información sobre estos aspectos será
considerada, más adelante, de manera rigurosa al momento de definir
las políticas y acciones que formarán parte de este Plan.
En síntesis,
la selección del área se ha hecho bajo la consideración
de los siguientes factores:
• Que contribuya
al cumplimiento de los objetivos generales de desarrollo urbano que el
Plan Metropolitano ha planteado para la ciudad de Colón.
• Que presente características urbanísticas que permitan
el diseño de políticas urbanas específicas consistentes
con las políticas urbanas generales enunciadas en el Plan Metropolitano
para Colón Centro.
• Que constituya en su imagen, posición geográfica
y carácter una oportunidad para presentar acciones que concuerden
con las aspiraciones y expectativas de la ciudadanía.
• Que pueda articularse y coordinarse espacial y funcionalmente
con otros proyectos significativos y de gran impacto que están
en vías de desarrollarse, como el desarrollo de las facilidades
portuarias de Cristóbal, el proyecto “Colón Puerto
Libre”, el desarrollo del litoral occidental como Destino Turístico
de Pasajeros, etc.
• Que reúna estructuras cuyas condiciones físicas
permitan considerarlas como edificaciones sujetas a redesarrollo o a conservación
y/o rehabilitación arquitectónicas.
• Que refleje la naturaleza de los problemas típicos de la
ciudad de Colón en sus aspectos físicos-económicos,
urbanísticos y ambientales.
Considerando la homogeneidad
que presenta el subsector Nº 1, Casco Viejo, la aplicación
de los factores mencionados podría conducir a identificar un sinnúmero
de pequeñas áreas que encajarían bastante bien con
el propósito del proyecto. En este sentido, el área se definió
a partir del examen de los mapas de condiciones físicas y de edificios
con valor arquitectónico e histórico, estableciéndose
unos límites dentro de los cuales se concentraran la mayoría
de los casos marcados en estos mapas. También se consideró
importante y conveniente que el área así definida se extendiese
hasta la Avenida Central (Paseo del Centenario), en consideración
a la característica cosmopolita de las actividades que ocurren
a lo largo de esta vía.
5.3 Caracterización del Área Seleccionada
En esta sección
del capítulo se hace una descripción pormenorizada de aquellos
aspectos, variables o características del área seleccionada.
Esta caracterización se hace para aquellas variables que se consideran
claves en la formulación de las políticas y acciones que
se proponen en este Plan Local. Por este motivo, dadas las limitaciones,
alcances y naturaleza del Plan, quizá habrá otras variables
para las cuales podría ser interesante recopilar información,
pero que no resultan relevantes para los propósitos de este estudio.
En la figura que se
muestra seguidamente, se han indicado los números de manzanas (en
base a una numeración del Plan Normativo, del Ministerio de Vivienda),
a los cuales se hará referencia en el texto descriptivo de las
características analizadas.
Figura 5-1
COEFICIENTE
DE INTERVENCION
5.3.1 Usos
Actuales del Suelo
En el área
seleccionada predomina el uso del suelo mixto (ver la Tabla Nº 5-1,
siguiente, en la cual se indican las cifras y porcentajes, y el Mapa Nº
6, en el cual se aprecia la ubicación de cada tipo de actividad),
que significa actividad no residencial en la planta baja de la edificación
y actividad residencial tipo apartamentos en los pisos superiores. La
actividad en el nivel de la calle es mayoritariamente comercial y de servicios,
tipo pequeña empresa (o pequeños negocios). En segundo lugar
de importancia (considerando la superficie ocupada) se presenta el uso
comercial/servicios aislado, es decir, sin combinarse dentro de la parcela
o de la edificación con otro tipo de actividad. En tercer lugar
se tiene el uso residencial de mediana y alta densidad (vivienda en apartamento).
Tomando en cuenta las expectativas y finalidades de un plan de esta naturaleza,
es posible adelantar que, considerando exclusivamente esta variable (uso
del suelo), las manzanas que presentan mejores oportunidades son aquellas
en las que predominan los usos residenciales y mixtos, y, por supuesto,
aquellas que tienen parcelas baldías: 24, 36, 48, 07, 49, 61 y
08. (En el anexo del documento se incluye la Tabla B-1, en la cual se
detallan las cifras relacionadas con las superficies de ocupación
según uso del suelo, por manzana).
TABLA 5-1
Distribución de Usos del Suelo
Uso
del suelo |
Sup
(M2) |
% |
Residencial |
6,500 |
10% |
Comercial/Servicios |
22,024 |
34% |
Mixto |
26,980 |
42% |
Institucional |
2,236 |
4% |
Baldío
|
6,460 |
10% |
Totales |
64,200 |
100% |
Fuente:
Elaborado por el Consorcio con datos obtenidos mediante observación
de campo.
5.3.2 Tenencia
de la Tierra
La tierra de la Isla
de Manzanillo perteneció originalmente al Ferrocarril de Panamá;
al pasar éste a la Compañía del Canal pasaron también
entre otras las tierras de Colón. Con los tratados Arias Roosevelt
y Remón - Eisenhower dichos terrenos se entregaron a la República
de Panamá y se asignaron a diversas entidades del Estado para su
administración. A partir de la década de 1960 hasta la fecha,
las entidades gubernamentales han vendido gran parte de estas tierras.
En el área
seleccionada, de 64,200 m2 útiles, el Banco de Desarrollo Agropecuario
(BDA) tiene 21 lotes con 4,236 m2, el 6.6% del área total. De los
21 lotes del BDA 9, el 42.8% cuentan con edificios en buen estado, 4 lotes
que representan el 19%, son susceptibles de rehabilitar, 6 lotes equivalentes
al 28.6% tienen estructuras para demoler; existe un lote vacante que significa
el 4.8% y un lote con una vivienda a restaurar, que representa el 4.8%.
El resto del área, o sea 59,954 m2 (5.9 Has.) que equivalen al
93.4% de la tierra, son propiedad privada. (Ver Mapa N° 7).
5.3.3 Aspecto General de las Edificaciones
A partir del mapa
base utilizado por la Dirección de Estadística y Censo,
de fotografías aéreas del área seleccionada y de
observaciones de campo, se ha podido hacer un estimado de aproximadamente
177 edificaciones existentes es esta zona. La calificación del
aspecto general que presentan las edificaciones ha seguido el método
tradicionalmente empleado por el Ministerio de Vivienda en estudios de
esta naturaleza (En la Tabla B-2 se muestran los datos respectivos, que
complementan el Mapa Nº 8). Se consideran en Buen Estado, los edificios
recién construidos y aquellos que exteriormente presentan buena
condición en sus elementos arquitectónicos estructurales
y de fachada: buenos acabados y buena pintura, puertas, ventanas y balcones
en buen estado. En Regular Estado se clasifican aquellas edificaciones
que a simple vista se aprecia que tienen varios años de haberse
construido y que presentan un mínimo grado de mantenimiento percibido
en el deterioro en su pintura, terminados arquitectónicos, techos,
pero que no exhiben daños estructurales, lo cual implica que pueden
ser rehabilitados para continuar su vida útil. Las edificaciones
en Mal Estado son aquellas, generalmente construidas a base de mampostería
y madera, que exhiben un evidente grado de descomposición tanto
en estructura (columnas, vigas, etc.) como en puertas y ventanas (destruidas
o en pésimas condiciones), presentando un aspecto ruinoso. Puede
afirmarse que, a diferencia de lo que sucede en otras zonas de la ciudad
de Colón, aquí no hay la típica casa de inquilinato
de madera, ya que los edificios de cuartos usualmente son de hormigón
con divisiones en madera. También puede afirmarse que esta es una
zona, en general, que presenta buen y regular aspecto físico en
las edificaciones, aunque puedan existir condiciones ambientales malsanas
en los exteriores (callejones utilizados como basureros públicos,
estancamiento de aguas pluviales, etc.).
Considerando esta
variable, las manzanas que presentan mejores oportunidades son aquellas
en las que predominan los edificios en mal y regular condición
física y, por supuesto, aquellas que tienen parcelas baldías:
06, 11, 36, 48, 34, 35 y 08. (En el anexo del documento se incluye la
Tabla B-3, en la cual se detallan las cifras relacionadas con las superficies
de ocupación según aspecto general de los edificios, por
manzana).
TABLA
5-2
Distribución de Edificios según Aspecto Exterior
|
Cantidad |
Sup |
(M2) |
% |
Buen
Estado |
105 |
59% |
38,760 |
60% |
Regular
Estado |
51 |
29% |
12,420 |
20% |
Mal
Estado |
21 |
12% |
6,560 |
10% |
Baldío |
---
|
--- |
6,460 |
10% |
Totales |
177 |
100% |
64,200 |
100% |
Fuente: Elaborado
por el Consorcio con datos obtenidos mediante observación de campo
5.3.4 Altura
de los Edificios
La consideración
de esta variable seguramente no es determinante para definir acciones
o políticas específicas, pero resulta útil como marco
de referencia para establecer regulaciones o reglamentaciones que orienten
la formulación de proyectos específicos consistentes con
los objetivos del Plan. En este sentido, lo relevante para mencionar es
que los edificios en su gran mayoría no exceden de los tres pisos.
De las 177 edificaciones, tan sólo 10 son de cuatro o más
plantas. En el otro extremo, sólo 7 edificios son de una sola planta.
En la Tabla Nº 5-3, que se presenta a continuación, se muestran
los datos acerca del comportamiento de esta variable en el área
seleccionada; en el Mapa Nº 9 se indica la ubicación de estos
edificios; y en el Anexo, se incluye la Tabla B-1, con los datos a nivel
de cada manzana.
TABLA
5-3
Distribución de Edificios según Número de Plantas
|
Cantidad |
% |
Sup(M2) |
% |
1
planta |
7 |
4% |
3,680 |
6% |
2
plantas |
7 |
1% |
40,736 |
64% |
3
plantas |
34
|
19% |
9,820 |
15% |
4-7
plantas |
10
|
6% |
3,504 |
5% |
Baldío |
--- |
--- |
6,460 |
10% |
Totales |
177 |
100% |
64,200 |
100% |
Fuente: Elaborado
por el Consorcio con datos obtenidos mediante observación de campo
5.3.5 Valoración
Arquitectónica de las Edificaciones
Uno de los aspectos
que ha venido manejándose con más fuerza en los últimos
años es el que trata acerca de la necesidad de establecer medidas
para salvaguardar la herencia arquitectónica de la ciudad de Colón.
Aunque el único instrumento legal actualmente vigente para la Isla,
en materia de regulaciones edilicias (el Plan Normativo), incluye ciertas
disposiciones tendientes a crear una imagen urbanístico-arquitectónica
parecida a la que brindan las antiguas edificaciones, esto no parece ser
suficiente, ya que no incluye medidas para preservar el valor arquitectónico
de los edificios representativos de una época de la historia colonense.
En algunos de los
documentos citados en la bibliografía aparecen identificados los
edificios considerados como de interés arquitectónico e
histórico, y tal identificación se muestra nuevamente en
este estudio (ver Mapa Nº 10). Se trata de edificaciones cuyo carácter
es reflejo de la herencia arquitectónica francesa: juguetona, virtuosa,
colorida y resplandeciente; con elementos evidentes que la caracterizan:
pasadizos cubiertos de arcadas (cobertizos), esquinas redondeadas, entradas
y balaustradas artísticamente diseñadas.Harrison Price,
et al: Strategic plan for a visitors destination at Colon`s historic waterfront;
p 3-17
Las manzanas en donde
todavía existen al menos entre 2 y tres edificaciones con valor
arquitectónico e histórico son: 11, 24, 36, 07, 60, 50 y
08. En esta última, toda la manzana estaba ocupada, en 1982, por
edificaciones con estas características; hoy día, sólo
existe la mitad.
5.3.6 Densidad
Neta de Población
La estimación
del indicador de la densidad neta de población en el área
seleccionada permitirá realizar una evaluación del grado
de concentración de la población. A partir del análisis
se podrá definir el tipo de política urbana específica
para las zonas y subzonas que presenten mayores concentraciones.
Las estimaciones realizadas
parten de los datos que tiene la Dirección de Estadística
y Censo, según la delimitación de los llamados segmentos
censales. Resulta importante reseñar aquí, a grandes rasgos,
el procedimiento seguido con la finalidad de evitar conclusiones u observaciones
inadecuadas. Las listas de segmentos incluyen el dato de población
total y la identificación de los edificaciones cubiertas en cada
segmento (el número del edificio). Un segmento puede incluir varios
edificios; y viceversa, un edificio puede estar repartido en varios segmentos.
Al identificarse las edificaciones en el mapa base, es posible que el
total de población esté cubriendo varias edificaciones.
Esto significa que la densidad neta resultante es un promedio para el
grupo de edificios, razón por la cual no sería adecuado
examinar el detalle por edificación, sino por grupos de edificaciones.
Esto es lo que se muestra en el Mapa Nº 11.
Al observarse los
datos estimados (ver Tabla B-2, en el Anexo) se puede afirmar que la densidad
neta promedio para las edificaciones con datos disponibles es de 1,686
hab/ha., considerada por el propio Ministerio de Vivienda dentro de la
categoría de Alta Densidad. Los distintos casos, o grupos de edificios,
presentan densidades por arriba de 2,500 hab/ha (hay casos que exceden
de los 3,000 hab/ha e incluso, los 5,000 hab/ha.). Estas cifras indican
lo que ya es conocido: existe una alta concentración poblacional
que requiere de una delicada política de descongestionamiento urbano,
diseñada y ejecutada conjuntamente con la población afectada.
5.3.7 Sistemas
de Movimiento
Los principales componentes del sistema de movimiento en el área
de estudio son los siguientes: la vialidad, el transporte público,
la circulación peatonal, la seguridad vial y los estacionamientos.
• La
vialidad y la señalización
La estructura de la
red vial está formada por un patrón reticular con jerarquía
formada por vías primarias, secundarias, colectoras y locales.
Dentro de esa jerarquía se pueden considerar como vía primaria
la Avenida Central. Las vías secundarias son las Avenidas Amador
Guerrero y Bolívar, y las calles 13, 11, 10, 9 y 7. Las demás
vías en el área son colectoras y locales. (ver mapa 12)
Las servidumbres
y líneas de construcción de las vías primarias y
secundarias es como sigue:
Nombre |
Derecho
de vía
(mts.)
|
Línea
de construcción (mts.) |
Rodadura
(mts) |
Número
de carriles |
Avenida
Central (*) |
45.00 |
9.50 |
8.9 |
4 |
Avenida
Amador Guerrero |
18.5 |
9.25 |
13.25 |
2 |
Avenida
del Frente |
18.5 |
9.25 |
9.5 |
2 |
Avenida
Bolívar |
18.5 |
9.25 |
13.25 |
2 |
Calle
7 |
18.5 |
9.25 |
9 |
2 |
Calle
9 |
17.5 |
9.25 |
9 |
2 |
Calle
10 |
18.5 |
9.25 |
9 |
2 |
Calle
11 |
18.5 |
9.25 |
9 |
2 |
Calle
13 |
18.5 |
9.25 |
9 |
2 |
(*)
Tiene isleta central. |
|
|
|
|
La señalización
vertical y horizontal presenta deficiencias para identificar la dirección
del flujo vehicular, al igual que para identificar el derecho del flujo
vehicular por la ausencia de señales de “alto” o “seda
el paso”. En el área no existen semáforos que puedan
ayudar a la circulación vial para, de esta manera, evitar accidentes,
especialmente en las vías con mayor flujo vehicular, y principalmente
en las intersecciones con la Avenida Central.
• El
Transporte Público y la circulación peatonal
El área es servida por el transporte público que corre a
lo largo de la Avenida Central y la Avenida Bolívar, brindando,
en términos de accesibilidad, un servicio adecuado para el área.
El recorrido de las rutas de buses forman parte de el sistema de servicio
en la isla de Manzanillo. Las paradas de buses, en general, no tienen
las dimensiones e instalaciones adecuadas para prestar un servicio, y
en algunos casos presentan ausencia de la bahía de buses para permitir
una operación segura, además de incrementar el nivel de
servicio en la red vial. Cerca del área de estudio se encuentra
la terminal de transporte interurbano, que es servida por la red vial
y el transporte público en el área.
La circulación peatonal realiza su flujo en forma paralela a las
vías, en aceras que tienen dimensiones que varían entre
1.20 y 3.50 metros.
• Los
estacionamientos
En el área
no existen lotes de estacionamiento. Los vehículos se estacionan
principalmente, al borde del cordón a lo largo de las vías.
Esta situación representa un problema de disminución de
capacidad de la red vial al utilizar los vehículos parte de la
rodadura de la calle para tales propósitos, además de obstaculizar
el tránsito de paso cuando los conductores realizan las maniobras
necesarias para estacionar los vehículos.
5.3.8 Infraestructura
En esta sección
se presentan las características de los sistemas de acueducto,
alcantarillado sanitario, drenaje pluvial, electricidad y telecomunicaciones
que sirven al área definida para el Plan de Acción Local
(PAL), en la ciudad de Colón.
• Metodología
La metodología
para identificar las condiciones y necesidades de infraestructuras se
ha basado en la concepción de desarrollo urbano aplicada por el
Consorcio. Se asume un factor de 750 hab./ha. para el componente residencial
RM-1 y 1000 hab./ha. para el componente RM-2, que son básicamente
las dos normas de desarrollo urbano aplicadas por el estudio.
Se hace un reconocimiento
general de las condiciones de la infraestructura existente. Como referencia
para el sistema de agua potable, hemos consultado el documento “Estudio
de Factibilidad y Diseños Finales de Proyectos de Optimización
de los Sistemas de Agua Potable de los Principales Centros Urbanos de
la República de Panamá, Informe de Factibilidad, Sub-proyecto
de Colón”, Hazen and Sawyer et al 1995, y entrevista en la
dirección de operaciones del Instituto de Acueductos y Alcantarillados
(IDAAN), región de Colón. Se han consultado, además,
el Plan General de Uso, Conservación y Desarrollo del Área
del Canal, ARI, 1997; los datos y comentarios del Plan Metropolitano y
el Plan Estratégico para el Destino Turístico de la Costa
Histórica de Colón.
• Sistema
de Acueducto
El área en
referencia es abastecida desde la planta potabilizadora de Monte Esperanza,
cuya producción actual es de aproximadamente 23.4 MGD. La línea
de conducción que abastece a la ciudad de Colón se compone
de dos tuberías de 20 pulgadas de diámetro, y recientemente
se ha instalado una nueva línea de 30 pulgadas de diámetro
con el propósito de optimar el caudal de entrada. Entre los planes
del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales, dirección
de Colón, está el de eliminar una de las tuberías
de 20 pulgadas, debido a su avanzado deterioro. Esto no alterará
el suministro de agua a la ciudad.
El IDAAN está
desarrollando un plan de rehabilitación del sistema de acueducto
de la ciudad de Colón, que será completado en tres etapas.
Dentro de las etapas ejecutadas está el reemplazo de toda la red
de acueducto que incluye los límites que definen el PAL. En la
Avenida del Frente se ha reemplazado la tubería antigua por una
línea de 8 pulgadas de diámetro; la Avenida Bolívar
dispone de una línea de 20 pulgadas de diámetro; en las
Avenidas Herrera, Amador Guerrero y la Avenida Central se han instalado
tuberías de 6 pulgadas de diámetro. Las líneas de
acueducto de las calles 8, 9, 10 y 11 también han sido reemplazadas.
(Ver Mapa Nº 13)
Las tuberías
de conducción y distribución de agua potable en la ciudad
de Colón, están enterradas en el suelo, el cual tiene un
nivel freático alto, y que se encuentra muy próximo a las
tuberías, lo que ha ocasionado problemas severos de corrosión,
sobre todo en las tuberías más antiguas, que sobrepasan
los 50 años.
• Estimación
de la demanda
Para el cálculo
de la demanda asumimos el área completamente desarrollada, de acuerdo
con los usos del suelo. Es común considerar la demanda no residencial
en función de la cantidad de metros cuadrados de ocupación;
sin embargo, para estos efectos hemos tomado como promedio un consumo
máximo de 125 galones por persona por día (gpd). Con base
en estos parámetros, el consumo total diario en el área
en estudio se encuentra alrededor de 0.60 MGD. Consideramos que la atención
de esta demanda será posible con las condiciones actuales.
• Sistema
de Alcantarillado Sanitario
El sistema de alcantarillado
sanitario de la ciudad de Colón tiene una antigüedad de casi
85 años. Este fue construido íntegramente con tuberías
de arcilla vitrificada. Alrededor de 1940, el sistema adquirió
su esquema actual de colección y evacuación final formado
en su mayoría por conductos de 8 pulgadas de diámetro. La
expansión del servicio al sector de la Zona Libre se comenzó
a partir de 1950 y se circunscribió a 9 ha., y se ha venido expandiendo
hasta cubrir las 38 ha. que ocupa actualmente.
Entre 1965 y 1966,
se ejecutaron los últimos trabajos de ampliación y mejoramiento
en el sistema, que abarcaron el sector oeste de la ciudad, siendo las
obras realizadas la instalación de colectores principales de alivio
a lo largo de las Avenidas Bolívar, Justo Arosemena, Central y
Calle 8ª y tramos cortos de colectores secundarios en algunas calles.
Como se nota, gran parte de estos trabajos se han realizado dentro del
PAL, lo cual es indicativo de que el sistema en esta área debe
tener suficiente capacidad para resistir el redesarrollo propuesto. Además,
durante estos trabajos se reconstruyeron los equipos de la estación
de bombeo de Guerrero y se renovaron los equipos de bombeo de Santa Isabel;
así como el tendido de las nuevas líneas de impulsión
en servicio actual que desembocan en el emisario submarino.
Estudios efectuados
por el Consorcio Delta-Sanidro (1981), quienes tomaron muestras del sistema
de alcantarillado sanitario demostraron que de 128 tramos de tuberías
examinados, 84 estaban en condiciones funcionales; es decir, que 65.6%
de los tubos estaban en buen estado y 34.4 % se encontraron en condiciones
deficientes para prestar el servicio.
En los últimos
años, el sistema de alcantarillado sanitario ha venido evidenciando
progresivas deficiencias en su funcionamiento. Adicionalmente, existen
9.6 km. de tuberías de 6" de diámetro, aún en
las áreas más densamente pobladas, las que no permitirían
un mayor desarrollo de la ciudad.
Por la existencia
de un elevado nivel freático, alrededor de -0.50 m.s.n.m., y dado
que las alcantarillas se encuentran entre 1.0 m y 5.50 m de profundidad,
casi la totalidad de las tuberías se encuentran asentadas sobre
terreno saturado. Es de esperarse, por tanto, que un considerable porcentaje
de las tuberías de las antiguas alcantarillas de arcilla vitrificada
estén agrietadas y/o rotas, y muchas conexiones domiciliares se
encuentren deterioradas, imponiendo una sobrecarga al sistema de alcantarillado
sanitario, el cual debe ser bombeado hacia el mar. (Ver Mapa Nº 14).
La contaminación
ambiental generada por la condición de la infraestructura sanitaria
incide directamente sobre la calidad de vida de los colonenses, Las condiciones
del sistema de alcantarillado permiten prever que las aguas servidas se
están infiltrando en el subsuelo y pueden estar afectando aún
los sistemas de distribución de agua potable.
• Sistema
de Drenaje Pluvial
El sistema de drenaje
pluvial de la ciudad de Colón fue construido durante los años
1908 a 1914, por la Compañía del Canal de Panamá.
Actualmente, dicho sistema es obsoleto y se encuentra muy deteriorado.
Sus elementos básicos son dos cajones pluviales de hormigón.
El primero de estos cajones mide 2.1 m x 2.4 m y corre a lo largo de la
Avenida Manuel Amador Guerrero hasta la bahía de Limón,
en el extremo norte y la bahía de Folk River en el extremo sur.
El segundo cajón, más pequeño que el primero, su
sección transversal es de 1.8 m x 1.8 m, corre desde la calle 8ª,
por la Avenida Meléndez y la Avenida Santa Isabel hacia el sur,
para finalizar en la bahía de Folk River. Ambos cajones tienen
áreas tributarias dentro del PAL.
En 1971 se construyeron
dos estaciones de bombeo, una en cada extremo del cajón de la Avenida
Manuel Amador Guerrero, basados en un estudio de Hazen and Sawyer, de
1964. Actualmente, ambas estaciones de bombeo, la del norte, estación
de Bahía Limón y la del sur, la estación de Folk
River, están fuera de servicio, agravando aún más
el ya serio problema de drenaje de la ciudad.
El cajón pluvial
de la avenida Manuel Amador Guerrero se encuentra parcialmente obstruido.
Por el mismo motivo, los tragantes no están operando, y el insuficiente
diámetro de las viejas tuberías de arcilla vitrificada no
les permiten evacuar los volúmenes de agua generados.
Así mismo,
se debe señalar que durante los períodos de marea alta se
ha observado el afloramiento del agua de mar a través de los tragantes
ubicados en los puntos más bajos, con elevaciones menores a los
0.60 m. También hay que indicar la aparente discontinuidad de sistema
de drenaje cuando se desplaza hacia el área del patio de contenedores
del muelle de Cristóbal. (Ver Mapa Nº 15)
Las condiciones del
nivel de drenaje representan impactos ambientales significativos en la
calidad de vida de los colonenses. La profundidad del nivel freático
y las deficiencias en los sistemas de drenaje pluvial se adicionan a los
afloramientos de agua de mar a través de los tragantes para crear
condiciones sanitarias indeseables.
• Sistema
de electricidad
En el área
del Atlántico se localizan tres estaciones generadoras con una
capacidad acumulada de 253 MW, que forman parte del Sistema Integrado
Nacional. El área de Colón recibe energía por medio
de dos líneas de transmisión de 115 KV., desde la planta
termoeléctrica de Bahía Las Minas. El sistema de distribución
del área de Colón comprende las Subestaciones Colón
I (4.16 KV.); Colón II (13.8 KV.); Colón III (12KV); Colón
IV (13.8 KV.) y Colón V (2.4 KV.). De cada subestación se
extienden los diferentes circuitos que forman la red de distribución
que sirven a los usuarios por medio de una red secundaria (120/240), o
de transformadores que normalizan el voltaje a las diferentes necesidades
de los usuarios.
Debido a la baja demanda
actual, el sistema no requerirá de ampliaciones para servir al
desarrollo propuesto. Sin embargo, es necesario considerar la demanda
de las áreas industriales que se están desarrollando o que
se desarrollarán en el futuro.
• Sistema de Telecomunicaciones.
El sistema de telecomunicaciones
en la ciudad de Colón está apoyado por nueve centrales y
cerca de veintiséis mil líneas, según se desprende
de la información suministrada por la Gerencia de Planificación
del INTEL, S. A., marzo de 1996. Según datos recientes, el área
de Colón mantiene un déficit por el orden de 2,300 líneas
telefónicas, ya que cerca del 98 por ciento de su capacidad instalada
(marzo, 1996) se encuentra asignada. Esta deficiencia en la oferta de
líneas telefónicas puede incidir en el normal desarrollo
de las áreas propuestas.
5.3.9 Oportunidades y Limitaciones Específicas
A continuación,
y a manera de conclusión del análisis de las distintas variables
consideradas en este capítulo, se presenta una síntesis
de las oportunidades y limitaciones que se han encontrado en el área
seleccionada. Sin embargo, resulta imprescindible realizar un par de comentarios
sobre el enfoque que se ha hecho para esta síntesis: 1) puede decirse
que es un diagnóstico acerca de lo que está ocurriendo,
sólo que expresado, no en términos de malestares urbanos,
sino en términos de grado de dificultad que presentan las distintas
zonas para emprender programas o proyectos consistentes con los objetivos
de desarrollo urbano; y 2) las oportunidades y limitaciones no se describen
aquí de manera explícita o evidente, sino bajo un enfoque
comprehensivo, lo que significa que dichas oportunidades y limitaciones
quedan internalizadas en la clasificación de zonas que se ha utilizado
para los fines del análisis.
La manera que se ha
creído más apropiada para obtener resultados útiles
al Plan de Acción Local, es clasificando las distintas zonas, subzonas
o grupos de parcelas (la denominación es irrelevante), de manera
tal que reflejen, en cierto sentido, el grado de dificultad o el grado
de intervención que se tendrá en las mismas a través
de este Plan. La distribución espacial de oportunidades se muestra
en el Mapa Nº 16.
Zonas
tipo “A”: Se incluyen en esta categoría
todas aquellas parcelas y/o edificaciones que presentan características
que inducen a no requerir ningún tipo de intervención o
acción en este Plan. Es decir, las zonas que están en buen
estado físico, o que tienen edificios de reciente data.
Zonas
tipo “B”: Constituida por el conjunto de lotes
actualmente baldíos. Por este motivo, el desarrollo (realización
de algún tipo de inversión) de estas zonas podría
incluirse como parte del Plan de Acción Local (PAL), según
sea el nivel de expectativa de los propietarios o de las propias autoridades.
Zonas
tipo “C”: Incluyen edificaciones en regular
o pésima condición física, cuya remodelación
o demolición no afecta población alguna, ya que en las mismas
se desarrollan sólo actividades comerciales o de servicios. Esta
es una categoría complementaria, o sobrepuesta, ya que en primera
instancia prevalecen las zonas tipo “D” o “E”.
Zonas
tipo “D”: Comprende aquellas edificaciones que
están en muy malas condiciones físicas (alto grado de deterioro
estructural y visual), que incluyen actividades comerciales o de servicios
aisladas, o actividades mixtas (comercio y/o servicios en la planta baja
y apartamentos en plantas altas), que requieren de su demolición
por los altos niveles de inseguridad y de peligro que presentan.
Zonas
tipo “E”: En esta categoría se incluyen
aquellas edificaciones que tienen un aspecto general de regular condición
física con usos comerciales y/o de servicios, aislados, o usos
residenciales y/o mixtos, con alta concentración poblacional,.
Estas edificaciones requieren de programas de rehabilitación y
de reubicación parcial de familias, con miras a reducir los índices
de hacinamiento habitacional. Se considera que estas zonas presentan mayor
grado de dificultad para emprender programas de renovación urbana,
debido a la necesidad de involucrar la participación de las familias
afectadas, ya sea para lograr su permanencia o su reubicación.
Zonas
tipo “F”: Se designan bajo esta clasificación
todas las edificaciones consideradas como de algún valor arquitectónico
o histórico. Se considera que son las zonas con mayores limitaciones,
toda vez que la consideración del aspecto patrimonial introduce
un factor de cierta complejidad en la viabilidad y en la factibilidad
de los programas y proyectos que puedan idearse.
En la Tabla Nº
5-3.1, que sigue, se muestra la distribución porcentual de las
superficies de tierra afectadas por cada tipo de zona. Se observa que
el área seleccionada presenta un 52 % de su territorio neto con
posibilidades para ser afectado por el conjunto de políticas de
este Plan, o sea, excluyendo las zonas tipo “A”.
Considerando el diagnóstico
que se ha hecho en las líneas anteriores, es posible establecer
un coeficiente de intervención para cada manzana. Este coeficiente
mide el porcentaje del área total de la manzana que es susceptible
de ser intervenida a través de las acciones específicas
que se proponen en el PAL. Así, si una manzana tiene un coeficiente
de 0 (cero) se estará indicando que la misma presenta cero oportunidades
de intervención (que es el caso de las manzanas que poseen edificaciones
en buen o excelente condición física). En el otro extremo,
una manzana que tenga un coeficiente de 1 (uno) estará reflejando
que la totalidad de la misma puede ser objeto de cierto tipo de intervención
(que es el caso de las manzanas que presentan tipología de zonas
de la “B” a la “F”).
• Manzanas con
coeficiente igual a 1.00: 06, 08 y 35
• Manzanas entre 0.75 y 0.99: 11 (0.82) y 48 (0.78)
• Manzanas entre 0.50 y 0.74: 49 (0.63), 07 (0.60), 24 (0.57), 36
(0.51) y 62 (0.51)
• Manzanas entre 0.25 y 0.49: 34 (0.49), 61 (0.47) y 60 (0.42)
• Manzanas entre 0.01 y 0.24: 09 (0.20), 25 (0.11) y 26 (0.09)
• Manzanas con coeficiente igual a 0.00: 10 y 50
En la Figura 5-3,
se muestran las manzanas del área seleccionada, según su
coeficiente de intervención.
TABLA
5-3.1
Síntesis de Oportunidades |
|
Sup
(M2) |
% |
Zonas
tipo “A” |
31,060 |
48% |
Zonas
tipo “B” |
6,460 |
10% |
Zonas
tipo “D” |
5,640 |
9% |
Zonas
tipo “E” |
10,160 |
16% |
Zonas
tipo “F” |
10,880 |
17% |
Total |
64,200 |
100% |
Zonas
tipo “C” |
6,800 |
11% |
Nota:
Ver el texto para la definición de los tipos de zonas
Fuente: Elaborado por el Consorcio
|
|
|
|
Fuente:
Elaborado por el Consorcio |
Consorcio
D&M/HLM/WRT/YEC/PW
Informe Final del Plan Metropolitano
22 de diciembre de 1997"Plan
de Desarrollo Urbano de las Áreas Metropolitanas del
Pacífico y del Atlántico"
Ministerio de Vivienda - República de Panamá
|
|
|